En sexenios anteriores el pueblo mexicano mantenía un respeto sobre dimensionado hacia el presidente en turno, más parecido al de un tlatoani moderno que al de un ciudadano elegido democráticamente por el voto popular y cuyas funciones deberían ser llevadas con orgullo, respeto y honradez. Estos Tlatoanis modernos educados la mayoría con estándares yanquis, con sumisión a la bandera de las barras y las estrellas, y en la mayoría de casos bajo la nómina de la CIA, estos no eran otra cosa más que empresarios o intento de empresarios con una voracidad desmedida por vender todo recurso a su disposición no importando el daño que a su propia tierra pudo haber causado, al lugar donde nacieron sus padres, sus abuelos, en fin, un acto sin dignidad alguna.
En 2018 tuvimos una votación en la que Andrés Manuel López Obrador, dio la estocada final a los tlatoanis modernos PRI, PAN y PRD, por medio de una jornada electoral histórica ya que el pueblo salió a votar masivamente por el líder de MORENA, buscando un cambio urgente y desesperado a la situación actual generada por los gobiernos que al permitir la entrada de armas a gran escala por parte de nuestro vecino del norte, los dólares de la droga y el entreguismo, por miedo o por dólares, los anteriores gobiernos en mexicano han apoyado abiertamente y sin ningún principio, permitieron la balcanización del país, como resultado, miles de desplazados por violencia o por falta de oportunidades. Estos partidos conocidos como PRIANRD por su asociación delictuosa, en su momento fueron defendidos a capa y espada por millones de mexicanos que en su afán de defender pequeños privilegios, o en su egoísmo personal, eran capaz de todo por mantener el status quo.
Debemos aprender de los errores cometidos, debemos saber nuestra historia, debemos dejar de dar todo el poder, toda la confianza a un solo hombre, todos somos humanos y podemos ser influenciados, manipulados o comprados de alguna u otra forma. Los norte americanos tienen proyectos a largo plazo, nosotros somos solo uno de esos proyectos ejecutándose actualmente, no podemos hacer el trabajo sucio con los migrantes, son nuestros hermanos centro americanos, ellos al igual que nosotros descienden de los antiguos habitantes de América. No podemos recibir dinero bajo ninguna circunstancia de los yanquis, nada es de a gratis, ellos harán lo que sea necesario para tomar nuestras tierras, nuestra agua, nuestras vidas, cada peso no lo cobraran 10 veces su valor. Los yanquis, ya no son controlados por sus líderes sino por los lideres sionistas que llevan a cabo un plan a escala mundial, de reducción de población, de envenenamiento masivo, y de aniquilación del pueblo palestino. Nos estamos enfrentando con el imperio más grande que jamás se ha visto, no son nuestros amigos, no les interesa que seamos vecinos, ellos no tienen amigos, tienen intereses.
AMLO debe tener mucho cuidado, si recibió ya los 10 mil millones de dólares del yerno de Trump, cometió un grave error, ahora tendrá que obedecer ciegamente y nosotros estamos incluidos en esa transacción.
Por nuestra parte, no debemos regresar al tiempo de la ceguera voluntaria de los gobiernos anteriores y darnos cuenta que tenemos que estar unidos, nadie es más importante en este país, todos somos iguales, y los más importante, estar alerta, informados y con los ojos bien abiertos a la realidad.
